Inicio este espacio, complementando la pregunta…¿se han usado realmente? Reflexionemos un poco respecto a sí verdaderamente las empresas han aplicado sus valores, si los empleados conocen ampliamente la misión de su empresa, su visión, y más allá de eso, si los comparten y viven. Los fundamentos corporativos son la columna vertebral de toda organización. Y sí, entiéndase por organización lo que el diccionario nos dice: grupo de personas y/o medios reunidos con un fin común.
Entrando en el ámbito de la generalidad, y recopilando experiencias, la mayoría de las empresas se conforma con tener los fundamentos bien redactados ( o a veces ni eso), pero guardados en un documento presentable o bien, dentro de algún campo en su página de internet, pero sin realmente darle una adecuada comunicación o peor aún, sin consultar con su plantilla de personal si están de acuerdo o no con ellos.
Algunas realizan esfuerzos, como organizar campañas que inviten a los empleados a Vivir los Valores, obteniendo resultados igualmente variados. En mi opinión, creo que mientras no se involucren los fundamentos desde el proceso de reclutamiento, inclusión e inducción, difícilmente se podrán obtener resultados altamente positivos una vez que la empresa ya está conformada y su dinámica y cultura ya esté viciada.
Si hemos comentado que una organización está conformada por personas con un fin en común, lo ideal, sería que tengan los mismos valores o al menos similares para poder facilitar el cumplimiento de la visión y misión.
Si ponemos un ejemplo cotidiano, podríamos compararlo con la elección de la pareja, si seleccionas al candidato (a) porque cumplió tus expectativas básicas o urgentes y luego descubres que sus valores y los tuyos no coinciden pues por más pláticas e intentos de acuerdos, etc., difícilmente podrán empatar y la ruptura vendrá como consecuencia. En cambio, si en la etapa de la conquista, del análisis, del conocimiento, comparten su visión y ésta empata, así como la forma en la que pueden alcanzarla pues las probabilidades de éxito de la relación son altas.
Visión, es la proyección de la empresa a largo plazo…¿hacia dónde vamos? Y la Misión es lo que somos y tenemos ahora para lograr dicha visión, ¿cómo lo pensamos lograr?.
Constantemente al preguntar a un empleado, ¿cuál es la filosofía de tu empresa? no tiene la respuesta, y esto es grave, sólo que los directivos, incluso gerencias de Capital Humano, no lo consideran como inconveniente en la empresa. Sin embargo, si fuera así, se evitarían mucha rotación de personal, despidos por comportamientos o acciones indebidas o en contra del negocio.
No es responsabilidad total de la empresa o de sus directivos, ésta es compartida con el empleado. No sólo es importante saber cuál será mi sueldo, mis horarios, mis responsabilidades, quién será mi jefe, sino también, cómo piensa mi empresa, cuáles son sus valores, sus fundamentos, qué es prioridad para la organización para entonces ver si me conviene entrar y si veo que ambos tendremos beneficios, si será un lugar en el que me sentiré cómodo con mi ser y mis intereses.
Y si somos específicos, también existen las empresas que cuidan mucho que su cultura organizacional no se pierda conforme el crecimiento de las mismas, y para ello, se apoyan en cimentar positivamente sus fundamentos al candidato desde que desea enviar su información para algún puesto en ella. Son firmes en indicar que si algún valor no se percibe en la persona o si es comprobado que no lo tiene, afecta en la decisión de ser contratado o no. Son empresas que en sus páginas de internet, en la imagen de sus empleados, en su publicidad y mercadotecnia dejan ver claramente cuáles son sus valores, mostrando congruencia organizacional, y además monitorean el cumplimiento de los mismos, lo que las lleva a diferenciarse del resto de las organizaciones y en su mayoría a tener empleados contentos, alineados e igualmente coherentes en sus acciones al saber qué se espera de él y que espera él de la empresa.
Mi conclusión es que los Valores, la misión, visión y en sí todos los fundamentos, no sólo deben seguir usándose, sino debemos saberlos usar, obtendríamos muchos beneficios en todos los sentidos tanto empleados como organizaciones y nos evitaríamos muchos problemas.